Tanzania bloquea X tras ciberataques y noticias falsas sobre la Presidenta
El gobierno de Tanzania ha bloqueado el acceso a la plataforma de redes sociales X (anteriormente Twitter) en todo el país, tras una serie de ciberataques que comprometieron cuentas oficiales y propagaron noticias falsas y contenido inapropiado. Uno de los incidentes más graves fue la difusión de información falsa sobre el fallecimiento de la Presidenta Samia Suluhu Hassan.
La cuenta de la policía fue hackeada el martes, donde se publicaron imágenes pornográficas y declaraciones falsas. También fue atacada la cuenta de Airtel Tanzania, una empresa de telecomunicaciones vinculada al gobierno. Las autoridades lograron eliminar las publicaciones y han iniciado una investigación para dar con los responsables.
El acceso a X fue interrumpido a nivel nacional el miércoles, siendo accesible únicamente a través de VPN, cuyo uso es ilegal en Tanzania sin aprobación estatal. Un portavoz del gobierno calificó los ataques como un “incidente menor” e instó a la calma, asegurando que los sistemas digitales permanecen seguros.
Preocupación por la libertad de expresión
Este bloqueo se produce a pocos meses de las elecciones generales de octubre, lo que ha generado preocupación sobre la libertad de expresión y la vigilancia estatal. X se ha convertido en una plataforma crucial para líderes de la oposición, activistas y periodistas en Tanzania.
Grupos de derechos humanos afirman que el cierre encaja en un patrón de censura digital bajo la presidencia de Hassan, quien busca la reelección. Recientemente, a la líder de la oposición keniana, Martha Karua, se le negó la entrada a Tanzania. Ella planeaba asistir a una audiencia para la figura de la oposición tanzana Tundu Lissu, quien enfrenta cargos de traición, un delito castigado con la muerte. “A ningún extranjero se le permitirá perturbar la paz de Tanzania”, declaró la Presidenta Hassan el martes.
Implicaciones y futuro
Mientras continúan las investigaciones sobre los ciberataques, los críticos temen que el gobierno esté utilizando el incidente para justificar medidas enérgicas contra la disidencia antes de las elecciones. La situación plantea serias interrogantes sobre el futuro de la libertad de expresión y el acceso a la información en Tanzania.