Gómez, Ex-Deseo de Boca, Silencia el Monumental: ¿Por Qué No Fue Xeneize?
La Copa Libertadores 2025 nos regaló un River vs. Palmeiras electrizante, marcado por un gol tempranero de Gustavo Gómez, el capitán del Verdao. Este tanto, un cabezazo potente que venció a Armani, no solo adelantó al Palmeiras en la serie de cuartos de final, sino que también reabrió un viejo debate: ¿por qué Gómez nunca jugó en Boca?
El Gol que Enmudeció el Monumental
Apenas cinco minutos transcurrían del partido de ida cuando Gómez, con un desmarque impecable, se elevó en el área para conectar un centro y mandar el balón al fondo de la red. La defensa de River, en particular Portillo, no pudo contener al defensor paraguayo, quien demostró su jerarquía y olfato goleador.
Pero la historia de Gómez pudo haber sido muy diferente. Antes de convertirse en figura del Palmeiras, el defensor estuvo a un paso de vestir la camiseta azul y oro. Dos veces, en 2018 y 2019, las negociaciones estuvieron avanzadas, pero por diferentes motivos, el acuerdo se frustró.
¿Por Qué se Cayó el Pase a Boca?
En declaraciones a la FIFA en 2023, Gómez reveló los motivos detrás de su fallido traspaso a Boca: "¡El destino quería que me uniera al Palmeiras! Estaba todo preparado, estábamos listos para firmar, pero cuando fui a firmar el contrato hubo algunas pequeñas cosas que no nos gustaron". Si bien no especificó cuáles fueron esas "pequeñas cosas", dejó claro que su destino estaba en Brasil.
Guillermo Barros Schelotto, quien lo dirigió en Lanús, fue uno de los principales impulsores de su llegada a Boca. El club incluso llegó a ofrecer 6.5 millones de dólares al Milan, dueño de su pase, pero la operación no llegó a concretarse.
Un Defensor de Élite
Hoy, Gustavo Gómez es considerado uno de los mejores defensores de América. Su liderazgo, solidez defensiva y capacidad goleadora lo convierten en un jugador clave para el Palmeiras y la selección paraguaya. Aunque su historia pudo haber tomado otro rumbo, el destino lo llevó a Brasil, donde ha cosechado importantes títulos y se ha consolidado como una figura destacada del fútbol continental.
El partido entre River y Palmeiras dejó en evidencia la calidad de Gómez, un jugador que Boca anheló, pero que finalmente encontró su lugar en el Verdao. Su gol en el Monumental no solo le dio la ventaja a su equipo, sino que también recordó una historia de negociaciones fallidas y un destino que, al final, lo llevó por otro camino.